LA ELECCION POR APARENCIA
POR: RICHARD LARROTA 1003 J.M.
Un hombre de nacionalidad colombiana era muy inteligente, destacado en sus estudios y sobre todo dedicado a lo que hacía. Estudiaba ingeniería mecánica en una universidad muy reconocida del país, vivía con su madre y su hermana y a parte de esto respondía por todos los gastos tanto de su familia como los de su estudio.
También había un hombre de nacionalidad estadounidense dedicado a sus estudios de ingeniería mecánica, su conocimiento era poco en comparación con el colombiano. Vivía solo, llegó a Colombia a estudiar hace 5 años, manejaba tanto el inglés como el español.
Un día estos dos hombres por causa del destino se presentaron en la misma empresa para una entrevista de trabajo para desempeñar allí su profesión. Entre todas las personas que fueron, el norteamericano fue quien se quedó con el puesto, con todas las comodidades y con un sueldo más alto que el ofrecido. El colombiano inconforme preguntó al que estaba a cargo ¿porqué habían elegido al americano si él tenía un conocimiento más básico sobre el tema, allí solo le respondieron que la decisión ya estaba tomada.
Es increíble como las grandes empresas colombianas rechazan la preparación de uno de sus compatriotas y prefieran la preparación de los extranjeros así no tenga la preparación requerida.
Eligen a estos extranjeros simplemente porque creen que si vienen de otro país su preparaciones mucho mejor que la de aquí, y muchas veces nosotros estamos más capacitados pero siempre los eligen a ellos.
Rima de Igualdad de Oportunidades
Que de igualdades me hablen
eso será en otra ciudad;
porque por aquí en nuestro país
todos debemos luchar.
Levantarnos muy temprano
para ir a trabajar,
con los salarios de hambre
y a buscar oportunidad,
porque el gobierno promete
mientras vamos a votar,
al presidente y su gabinete
todos debemos linchar.
Porque cada día mas impuestos
que nos obligan a pagar,
mientras ellos se enriquecen,
el pobre a dónde va a parar,
desplazados de violencia por todo
el territorio nacional
y quitarnos la oportunidad
de educar a nuestros hijos
en una digna sociedad.
SOLANGIE YULIETH BOHORQUEZ, JULIETH ANDREA LINARES, 1001